23/10/2020

 

1. ¿Estás dando clases actualmente como docente? ¿Das clases a niñas pequeñas?

Actualmente no estoy en activo como profesora de Educación Primaria, pero sí estoy interesada en trabajar de ello cuando me concedan la oportunidad… En estos momentos para seguir vinculada al mundo de la educación lo que estoy haciendo es un Posgrado sobre la Autoestima, Interioridad y Asertividad en la UIB, es decir, una formación relacionada con la educación emocional. Desde que empecé mi carrera universitaria, siempre me ha encantado el tema de las emociones y es una asignatura pendiente que tenía en mente hacer desde entonces. Creo que, ya que no me llaman de ningún centro educativo (desgraciadamente), es un buen momento para seguir aumentando mi formación académica e incluso, para profundizar un poco más en mí misma porque lo que te permite este posgrado es conocer técnicas y dinámicas que después, cada uno se las puede aplicar como terapia personal. Respecto a la segunda pregunta, actualmente llevo dos años dando clases de refuerzo a una niña de 8 años en Palma de Mallorca.

2. ¿Cómo va el proyecto de combinar música y gimnasia rítmica, que harás con tu pareja, el contrabajista Pablo Moreno Saura?

El proyecto con Voicello, Pablo y yo se detuvo debido a la situación actual de la pandemia y, por otro lado, la pareja Voicello tiene otros planes de futuro. Así que, principalmente, por estos dos motivos, no hay nada programado, ni para dentro de unos meses, ni para un futuro. Ya no creo que se vaya a realizar ninguna actuación de este tipo, aunque si se llegara hacer algo, yo como bailarina ya no podría serlo (estoy muy vieja para hacer gimnasia rítmica, jajajjjajaa) pero sí me encantaría participar como coreógrafa para que participara alguna gimnasta joven en mi lugar.

3. ¿Cómo fue que se gestó este proyecto? ¿Cómo surgió la idea de combinar música y gimnasia?

La idea surgió de la pareja Voicello, que son unos artistas excelentes y con mucha energía. Además de ser unos buenos amigos, ellos como pareja son magníficas personas y hemos estado reunidos en más de una ocasión (cenas, conciertos, etc). En una de esas reuniones nos plantearon a Pablo y a mí colaborar en alguna de sus actuaciones para el próximo concierto de Voicello que se iba a celebrar por estas fechas (septiembre/octubre 2020). Pablo y yo nos lo pensamos y la idea nos gustó mucho. Empezamos a buscar obras en las que se pudiera hacer posible la combinación de contrabajo y gimnasta/bailarina. Pero finalmente, alcanzamos a solo programar las obras que podríamos probar de hacer y analizar si resultaba o no efectivo. Después de la selección de las obras fue justo cuando España entró en estado de alerta por el Covid-19.

 4. ¿Llevabas unos años apartada de la gimnasia rítmica?

No exactamente. Es decir, como gimnasta es cierto que llevo unos 6 años ya retirada, pero todavía no me he apartado de la Gimnasia Rítmica por completo, ya que la rítmica forma parte de mi vida y aunque ya no compita, ahora lo vivo desde el otro lado del tapiz como entrenadora. En estos últimos tres años atrás me he formado como juez y técnico de Gimnasia Rítmica y en junio de 2020 finalicé todos los niveles de formación para la obtención de los títulos.

5. ¿Puedes contarme algo en relación con tus experiencias con la gimnasia rítmica, incluyendo tus inicios y tus estudios?

Sí. Cuando era pequeña mi pediatra les dijo a mis padres que necesitaba practicar algún deporte para ganar algo de masa muscular, ya que de pequeña era muy delgadita (como un fideo, jajajaj ^^). Así que con 5 años estuve un año practicando ballet y me gustó, pero al año siguiente donde practicaba ballet ya no hacían clases y en su lugar, impartían clases de Gimnasia Rítmica, así que mis padres me apuntaron a Rítmica, lo probé y desde los 6 años hasta los 21/22 años he competido todos los años.

En mis inicios desde los 6 años hasta los 12 años practicaba gimnasia rítmica en un gimnasio pequeño con mi entrenadora de toda la vida, Patxi. A los 12 años sentía que se me hacía un poco pequeño el sitio y el grupo con el que practicaba, ya que me convertí en la más mayor de mis compañeras con diferencia. También el mismo año coincidió que pasaba a mis estudios de la ESO en otro centro escolar y aquel cambio me permitió conocer a una gimnasta que ya conocía solo de vernos en las competiciones y como coincidíamos en la misma clase, le pregunté por su club en el que entrenaba. Finalmente, muy a mi pesar y con mucha pena, me despedí de mi primera entrenadora y cambié de club que, además, el lugar de los entrenamientos del nuevo club me quedaba justo al lado de mi nuevo instituto al que iba (fue un año de cambios ^^).

Seguí compaginando mis estudios de la ESO y Bachillerato con mi deporte favorito. Aunque había temporadas que por falta de tiempo no podía asistir a todos los entrenos, pero no era un gran impedimento para mí, ya que, generalmente, en las competiciones obtenía buenos resultados y siempre he pensado que, gran parte era porque me acompañaba la buena suerte y me concentraba al máximo los últimos entrenos previos y en la misma competición.

Una vez que empecé mi carrera universitaria ya era más complicado seguir el ritmo de los entrenamientos, estar en forma y al mismo tiempo, llevar vida de universitaria. Finalmente, en tercero de carrera fue cuando decidí dejar la gimnasia rítmica como deportista. La edad ya era un hándicap importante porque en el mundo de la Gimnasia Rítmica la vida de una gimnasta es muy corta y por así decirlo, yo ya había pasado por mi mejor momento como deportista. Aunque he de decir que, los últimos tres años antes de retirarme quedé campeona y/o subcampeona de Mallorca y Baleares en mi categoría como Senior B.

Al poco tiempo de haberme graduado en Magisterio de Educación Primaria con la mención de Educación Física en el CESAG, 2015 (Centre d’Ensenyament Superior Alberta Giménez) fue cuando empecé a cursar los niveles de formación como Técnico y juez de Gimnasia Rítmica.

Información adicional: Los cursos de formación para juez constan de 2 niveles (nivel autonómico y nivel nacional). Mientras que la formación para técnico (entrenadora) constan de 3 niveles (uno por año). En mi caso, ya he completado toda mi formación.

Actualmente, aunque tenga toda la formación requerida no ejerzo de juez en las competiciones porque no es mi pasión. En estos momentos, a mí lo que de verdad me llena y me apasiona de la Gimnasia Rítmica es trabajar cerca de mis gimnastas hasta el último minuto antes de salir al tapiz y mostrar al público y a la mesa de jueces nuestro trabajo realizado en meses en solo 1’ o 1:30’’, que es lo que dura cada actuación.

6. ¿Tienes algún nuevo proyecto relacionado con la gimnasia?

Sí, tengo entre manos un proyecto por cuenta propia. Este mes de octubre 2020 hemos empezado a entrenar a un grupo pequeño de gimnastas a nombre de mi propio Club de Gimnasia Rítmica, llamado Club Rítmica Abel. Todavía hay que terminar de atar cabos, ya que el club es muy reciente y debido a la situación actual del Covid-19 y otras exigencias técnicas, cumplir mi sueño de hacer mi propia escuela y club de gimnasia se me hace cuesta arriba y ahora mismo es bastante complicado, ya que este año los colegios no ofertan ninguna actividad extraescolar, hay límites de aforo entrenes donde entrenes, las gimnastas deben entrenar con mascarilla, siempre debemos asegurarnos de que se cumplen las distancias de seguridad, etc. La única suerte que ahora mismo me acompaña y me anima a seguir luchando día a día por todo lo que quiero para mi club deportivo es la confianza que depositan las gimnastas y, sobre todo, los papás de mis gimnastas sobre mí. Hay mucha responsabilidad detrás de un proyecto como este y me gustaría pensar que, si los inicios son tan difíciles de llevar y uno sigue luchando por conseguir unos objetivos, quiere decir que vamos por buen camino, aunque hay días que parezcas perdido y rendido, pero la clave es seguir e intentar hacer las cosas lo mejor que uno puede.